miércoles, 5 de enero de 2011

EL MISMO MAR DE TODOS LOS VERANOS


Acabo de concluir la lectura de EL MISMO MAR DE TODOS LOS VERANOS, de ESTHER TUSQUETS (Compactos Anagrama, 229 páginas).

El mismo mar de todos los veranos es una obra pionera en su estructura y en su temática. A diferencia de sus contemporáneos que eludían el argumento buscando la complejidad de la construcción, Esther Tusquets se limita a referir los sucesos que conforman la biografía del personaje. En cuanto al tema, es una novela de notorio erotismo que trata sobre relaciones lesbianas con una franqueza avanzada e insólita en nuestras letras.

Una primera novela deslumbrante que consagró de inmediato a Esther Tusquets como una de las grandes revelaciones de la literatura española de las últimas décadas. Escrita en un castellano suntuoso y eficaz al mismo tiempo, narra un proceso hacia la indiferencia y la autodestrucción: la narradora descubre paulatinamente que su realidad es una mera reducción de la vida y el amor un sueño irrealizable en el que siempre traicionamos o nos traicionan. Quizá sea El mismo mar de todos los veranos la primera novela amoral que produce la literatura española en muchos años, o al menos la primera novela escrita al margen de los valores de la moral judeocristiana que continúan rigiendo nuestra sociedad. Los personajes de Esther Tusquets no proponen otra norma de conducta que la conquista imposible, por otra parte de la felicidad.



Esther Tusquets nació en Barcelona el 30 de Agosto de 1936. Estudió en el Colegio Alemán y, en las Universidades de Barcelona y Madrid, estudia Filosofía y letras, especialidad Historia. Dio clases de literatura e historia durante varios años en la Academia Carillo.

A principios de los sesenta, siguiendo los pasos de su padre se encarga de la dirección de la editorial Lumen. Como la directora de Editorial Lumen desde los años sesenta, Esther Tusquets ha participado en, y en cierto modo determinado, el campo literario durante los últimos años. En su último libro, publicado por la editorial dirigida por su hija Milena, Confesiones de una editora poco mentirosa, narra sus recuerdos de su dilatada experiencia editorial.

Su carrera literaria se desarrolla tardíamente, ya que empezó a publicar tarde. En 1978 aparece su primera novela, El mismo mar de todos los veranos, la cual inicia una trilogía que continúa en 1979 con El amor es un juego solitario, ganadora del Premio Ciudad de Barcelona, y termina con Varada tras el último naufragio en 1980.

La narrativa de Tusquets se mueve en un sutil equilibrio entre una temática supuestamente femenina y un estilo netamente innovador. Sus críticos suelen enfocar su tratamiento constante y profundo del florecimiento de la llamada «conciencia femenina», o sea el desarrollo de la poca trama que existe a base de una óptica que parte del conocimiento, por una parte psíquico y por otra sexual, de una mujer madura junto con un estilo que se ha llamado a la vez barroco, elíptico, y arabesco, centrado en una visión del lenguaje.

1 comentario:

  1. Hacía tiempo que no leía una novela tan tremendamente peñazo. ¡No hay puntos y aparte!Tengo una edición de 1988 pero no creo que haya cambiado la puntuación. Me salto páginas a ver si pasa algo, porque tanao recuerdo de la protagonista,tantos pensamientos, tantas vueltas sobre cualquier nimiedad,tanta repetición, por muy bien escrito que esté -eso no lo discuto- cansa a cualquier lector.
    Enhorabuena si lo has leído completo, deduzco que eres paciente, muy, muy paciente.

    ResponderEliminar