miércoles, 27 de enero de 2010

Perro callejero


Acabo de concluir la lectura de “Perro callejero”, de Martin Amis (Compactos Anagrama, 430 páginas).

Perro callejero se interna en los tabúes sexuales, sin rehuir el incesto, la pornografía o el onanismo. Se trata de un viaje que elude los eufemismos y el lenguaje científico. Amis no busca la perspectiva del erudito, sino el conocimiento que nace de la vivencia, del contacto con esas experiencias que se refugian en el subsuelo de la conciencia, anhelando la oscuridad y el secreto.

Perro callejero utiliza la peripecia de Xan Meo como centro magnético de un relato que transita de la dispersión a la perfecta sincronía. Xan Meo es un hombre de múltiples talentos: actor, músico, escritor, y también hijo de un célebre delincuente. Una noche, Xan se sienta a tomar una copa en la terraza de un pub y, al poco rato, dos hombres le parten la cabeza a cachiporrazos. Tras una difícil convalecencia será otro. Deberá acostumbrarse a su nuevo ser, como todos los que le rodean, porque Xan se convertirá en un antimarido, en un antipadre, movido por impulsos primarios y con una sexualidad muy perturbadora.

Pero hay otros personajes que inciden en la vida de Xan. Clint Smoke, un periodista de un diario amarillista volcado en la pornografía y las noticias de escándalo, y también Henry England, el rey de Inglaterra y padre de la Princesita, a la que alguien ha fotografiado desnuda en su bañera. También está el misterioso Joseph Andrews, como una araña en el centro de una vasta red. Y en el núcleo de todo: Edipo, los padres como posibles corruptores devoradores de sus hijos, el difícil pasaje a la madurez.



Martin Amis (Inglaterra, Oxford, 1949)

Escritor británico hijo del también escritor Kingsley Amis, nació en Oxford en 1949, universidad en la que más tarde se graduó. De niño vivió en diferentes lugares debido a que su padre impartía clases entre Inglaterra y Estados Unidos. Tras una joven etapa en la que no sentía interés por los estudios, entró en contacto con la obra de Jane Austen y se convirtió en una de las motivaciones para su posterior ingreso en la universidad.

Desde 1971, año en que se graduó trabajó como crítico literario en el London Observer, y desde 1972 y hasta 1974 ejerció como encargado editorial y director de la sección de narrativa y poesía en el Times Literary Suplemment. Con tan sólo 27 años llegó a ser el director de New Statement para pasar a ser más tarde colaborador especial de Observer, de donde ha publicado recopilaciones de sus artículos.

Considerado por una parte de la crítica como un brillante autor, con un satírico uso del lenguaje a la vez que cuidado, otra sección opina de sus textos que tratan elementos e historias desagradables. No deja de quedar patente la dureza a veces de las historias y las palabras que emplea, pero tampoco se olvida de su preocupación por problemas del mundo contemporáneo en referencia a las drogas, el sexo o la violencia.

Martin Amis nunca ha desperdiciado la oportunidad de escarnecer los convencionalismos políticos, éticos o formales. Su complacencia con la provocación se manifiesta en toda su obra. En Koba el Temible (2002), se mostraba particularmente airado con los intelectuales que simpatizaron con el estalinismo, sin excluir a su padre, Kingsley Amis.

No hay comentarios:

Publicar un comentario